viernes, 12 de febrero de 2010

E-vangelización

El Papa Benedicto XVI no es tan peregrino, carismático ni popular como lo fue Juan Pablo II. Pero lejos de ser el pasivo “Pontífice en transición” que se preveía, el ex cardenal Joseph Ratzinger sorprende por su presencia dinámica y constante en los medios de comunicación y en el internet.
Benedicto XVI no se priva de la polémica ni de criticar a los medios por su trivialidad y la promoción de la violencia. Sin embargo, su postura conserva claramente distancia de la Segunda Conferencia Episcopal de Medellín, en la que hace 42 años algunos obispos latinoamericanos cercanos a la “doctrina de la liberación”, crucificaron a los medios, acusándolos por todos los pecados del capitalismo, el subdesarrollo y la dominación de los oprimidos.
En sintonía con Paulo VI y Juan Pablo II que calificaban a los medios de “dones de Dios”, el Papa actual entiende que es mejor no alterarse ante los medios y las nuevas tecnologías, sino adaptarse a ellas y aprovecharlas como herramientas para crear comunidad (aunque sean virtuales), frenar la emigración de feligreses a religiones más modernas o permisivas y combatir lo que escasea: espiritualidad, vocaciones sacerdotales y multitudes en misas.
En el espíritu de esta e-volución e-vangelizadora, para el Día Mundial de las Comunicaciones a fines de enero, el Sumo Pontífice desafió a los sacerdotes a extender su dominio sobre las nuevas tecnologías. Les pidió que usen “este regalo para la humanidad” que es el internet y que participen en blogs y en redes sociales, dando como ejemplo su propia tarea misionera, desplegada en podcasts, en su canal de YouTube y en www.pope2you.com, donde se muestra sermoneando en catedrales, igual que visitando mezquitas y sinagogas.
Pero al mismo tiempo, a este Pontífice de 82 años y de carácter moderno y ecuménico no le tiembla el pulso ni se amilana cuando tiene que defender doctrinas conservadoras y polémicas hasta para la propia Iglesia, como cuando supervisaba la fe católica desde la Congregación para la Doctrina de la Fe. Se opone a la consagración sacerdotal de las mujeres, favorece el celibato y rechaza con determinación otras conductas, como los matrimonios gays, las relaciones extramaritales o la manipulación de las células madres.

Su mayor acierto es haber asumido la tarea de exorcizar el funesto problema de los curas pedófilos, un tema que perseguirá a la Iglesia por generaciones y que también acaba de explotar en Alemania en colegios regentados por jesuitas. También en Irlanda, el Vaticano pidió que la justicia ordinaria sea la que deba castigar a los pederastas, lo que provocó la renuncia de cuatro obispos por el delito de encubrimiento.
Además, pese a sus esfuerzos a favor de la unión ecuménica, este Papa critica con firmeza la persecución de las minorías cristianas en países musulmanes, enoja a los judíos por motivar la beatificación del Papa Pío XII a quien se le cuestiona un prolongado silencio frente al Holocausto o provoca a los anglicanos facilitando la conversión al catolicismo a aquellos sacerdotes de la Iglesia de Inglaterra que rechazan la tolerancia a la ordenación de mujeres y homosexuales.
Y en cuestiones más terrenales, ni siquiera se amedrenta ante lo que sea más popular o aparenta intocable. A la película más taquillera de la historia, Avatar, a la que ni los críticos sueñan con augurarle fracasos en la noche de los Oscar, Benedicto, desde L’Obsservatore Romano le cuestiona su mensaje simplista “inundado de un espiritualismo vinculado al culto a la naturaleza… que convierten a la ecología en la religión del milenio”.
Ante este nuevo desafío e-vangelizador seguramente se multiplicará el uso del internet por parte de los religiosos, así como hace 40 años distintas congregaciones de católicos crearon sus propios medios incentivados por el mandato de Communio et Progressio (Comunión y Progreso) e Inter Mirifica (Entre las cosas Maravillosas) que surgió del Concilio Vaticano II, documentos pastorales sobre el buen uso de los “dones de Dios”.

Con este llamado a usar las nuevas tecnologías, el Papa Benedicto XVI aleja de la tentación a muchos religiosos que podrían adjudicarle al internet pecados y conspiraciones que otrora se le achacaban a los medios tradicionales. Adoptar innovación y creatividad, así sean del profano Silicon Valley, muestra una sabia e-volución.

jueves, 11 de febrero de 2010

La verdadera revolución

La verdadera revolución no es la egoísta socialista de Hugo Chávez. Tampoco la putrefacta y añeja al estilo cubano de los hermanos Castro, ni la ciudadana de Rafael Correa, ni la de los oprimidos de Evo Morales, ni la renovada que celebró hoy el gobierno de Irán, ni la cultural china o tantas otras que siempre se las ingeniaron para quitarles libertad individual a los hombres a cambio del beneficio social.

La verdadera revolución no pertenece a gobierno alguno. La verdadera revolución actual, de hoy, está en el sector privado, es la que anunció Google, la que realmente afectará a todos los ciudadanos por igual y mejor.

Google anunció que se lanza al mundo de las telecomunicaciones, ya como proveedor, no solo como un buscador que usaba a otros proveedores, pero con la novedad que competirá con una banda ancha para las telecomunicaciones, cien veces más veloz que las que usamos actualmente. Una revolución cuyos efectos y beneficios son incuantificables todavía, pero que no solo alentarán la economía por los empleos que las nuevas tecnologías crean, sino por los beneficios que acarrean a todas las disciplinas de la vida científica, del entretenimiento, de la información de la informática, de la banca, de las relaciones interpersonales.

El mundo está cambiando y a pasos agigantados, y mientras son los gobiernos los que tratan de regular y poner frenos a ciertos adelantos por temor a lo desconocido (léase aquí censura y regulaciones al internet y las redes sociales) es el sector privado el que está empujando con innovación y creatividad.

Lo más destacado del anuncio fue que el gobierno de Estados Unidos, lejos de temerle a la nueva iniciativa o imponer varios peros, salió decidido a felicitar al gigante de la informática. Una actitud que poco se observa en las revoluciones que menciono en el primer párrafo.

Lejos de comportarse como un régimen como la Conatel venezolana, la Comisión de Comunicaciones estadounidense dijo que aprovechará la iniciativa de Google para incluirla en el Plan Nacional de Banda Ancha y así acelerar el proceso del sector privado para que siga contribuyendo con inversiones, empleos y competitividad.

miércoles, 10 de febrero de 2010

Chávez y la saturación

Imagino que los venezolanos ya deben estar cansados de ver a Hugo Chávez hasta en la sopa. No hay presidente alguno que se le parezca. Aparece en cualquier lado y a toda hora. Muchos se preguntan, claro: ¿Cómo hace para gobernar alguien que habla y habla?

La estrategia es inteligente desde su punto de vista. Chávez siempre incrementó su presencia en los medios y en sus impuestas cadenas y sus Aló Presidentes en años con elecciones. Pues claro, con setiembre 2010 en su objetivo, no es raro que esté experimentando con otras formas de presencia mediática. Esta vez lo hizo con “De repente con Chávez”, título que muestra el carácter de periódico y sorpresivo que tendrán sus alocuciones radiales por Radio Nacional y YVKE Mundial.

Chávez anunció que este nuevo programa aparecerá cuando él quiera y a la hora que quiera. Amo y Señor; ya que cierra el espectro de todos los medios, con su Aló Presidente en la TV, con sus columnas en la prensa ``Las líneas de Chávez'', además de todos los programas y páginas de internet donde su batallón de mercenarios y propagadores están al pie del cañón.

Lo que sus consejeros no parecen decirle o él no escucha, es que en comunicación, más no significa mejor. En cuestiones de propaganda se puede pasar muy rápido de la persuasión a la saturación. Y Chávez parece ya entrar en este estadio.

martes, 9 de febrero de 2010

Resurge Sarah

Sarah Palin, a pesar de las críticas que recibió como candidata de la fórmula con John McCain y luego cuando renunció como gobernadora de Alaska, reapareció sin problemas en el momento adecuado; justo cuando muchos cuestionan el liderazgo de los demócratas con Barack Obama y su caída de popularidad.

Tanto Sarah como Scott Brown, el senador republicano por Massachusetts que birló las aspiraciones de Obama de continuar el legado de Ted Kennedy con otro senador demócrata, ya han insinuado ante las reiteradas preguntas de los medios que ambos son “presidenciables”. Claro que falta mucho tiempo para una próxima elección, pero como hacía tres o cuatro meses atrás los republicanos no tenían a nadie con pinta de líder, los nombres de Sarah y Scott se hicieron notar.

Pero Sarah no parece tener las intenciones de correr por los republicanos, a los que debió sufrir con su mofa por su falta de pericia sobre cuestiones internacionales. Sarah va mucho más y se ha tomado de la mano de los medios – los mismos que la sepultaron – para resurgir con un libro, como comentarista en la cadena conservadora Fox, con discursos que cobra a 100 mil dólares cada uno; y lo que no consiguió con los medios tradicionales, lo encontró en las redes sociales, donde su crecimiento de imagen es sostenido.

Sarah está midiendo sus fuerzas y a sus audiencias. Mucho depende de su imagen y sus discursos conservadores y de lo bien o mal que le vaya a los liberales y a Obama, para que una postulación como republicana o independiente sea más que una insinuación para el 2012.

lunes, 8 de febrero de 2010

Correa y la excusa perfecta

El presidente Rafael Correa de Ecuador tiene un látigo por lengua y siempre encuentra la excusa perfecta para atacar la libertad de prensa, a los “mentirosos” medios y periodistas, con tal de seguir argumentando a favor de un emporio de medios estatales que está creando con el dinero de los contribuyentes para aumentar su capacidad de propaganda estatal.
Este fin de semana atacó a El Universo de Guayaquil (por denuncias sobre maquinarias de la industria petrolera que afectarían la ecología) y al diario Hoy de Quito (por denuncias sobre irregularidades en la compra de turbinas para generar energía eléctrica) quejándose que ambos diarios publican información falsa y mentirosa, y que estarían boicoteando al gobierno.
Correa aprovecha sus programas sabatinos para dedicar gran parte de los mismos a criticar a los periódicos y cualquier medio que haga denuncias sobre corrupción, considerando que es una fórmula para desprestigiar y desestabilizar a su gobierno. Obviamente, nunca se le ocurre agradecer a la prensa, y plantear que le pedirá a las autoridades competentes que investigará las irregularidades, lo que debiera hacer un gobierno normal y sensato de acuerdo al mandato que tiene en una democracia: administrar en forma eficiente el dinero de los ciudadanos.
Pero lo de Correa va más allá. En sus programas no solo hace propaganda de los medios que el su gobierno mantiene, expropió y creó, sino que además plantea que seguirá aumentando su capacidad de comunicación con una línea de medios oficiales, que por más que él los llame público, con la forma que maneja su gobierno, no caben dudas de que los usará para la propaganda oficial.
Este es un párrafo textual de su alocución del sábado pasado, que habla por sí mismo: “Gracias a Dios – dijo Correa – es que tenemos estos enlaces los sábados para poder aclararlo, sino se quedan con esta mentira. Como conclusión, no compren estos periódicos, infórmense un poco con la televisión, los canales públicos, compren El Telégrafo, estamos preparando un diario más popular que informe objetivamente, porque diario El Telégrafo está posicionado por un diario editorial, de cosas más profundas, pero tendremos un diario de consumo más popular para no ser víctimas de los que nos quieren engañar, engañar y engañar, para hacerle daño al Gobierno, para tratar de abortar la revolución ciudadana, un proyecto político inédito y volver a los privilegios de siempre, pero no pasarán nunca más al pasado”.

domingo, 7 de febrero de 2010

Mardi Gras por adelantado

Faltan ocho días para que empiecen los carnavales de Mardi Gras en la Bourbon Street de New Orleans, pero los festejos empezaron por adelantado esta noche como muchos soñaban, con un trofeo de Super Bowl que sirve para cerrar un ciclo atroz y una lenta recuperación después del devastador huracán Katrina.
Los Saints no eran los favoritos deportivamente hablando, pero el sufrimiento por Katrina atraía todas las simpatías. Creo que ni los fanáticos de los Colts se sintieron tan mal por la derrota como por la intercepción que los Saints le hicieron al super quarterback, Peyton Manning. Es que los quarterbacks de esta estatura no deberían perder nunca; siempre se necesitan esos ídolos inalcanzables que ponen las varas cada vez más altas.
Pero a Manning le sucedió lo mismo que a Bret Favre de los Vikings hace quince días. En el momento en que se disponía a ganar el partido, los Saints sacaron fuerzas invisibles – esa fortaleza que deviene de los momentos difíciles – y con un par de intercepciones lo sacaron cabizbajo.
El Super Bowl fue de mayor a menor este año. El primer tiempo fue medido y aburrido como dos boxeadores en el primer round. El entretiempo fue peor. Nunca disfruté The Who y menos ahora, tan cerca de los Grammy, cuando tenía el oído preparado para Beyoncé, Rihanna, Taylor Swift. Incluso hubieran podido dejar que siga cantando Kerry Underwood después de su emocionante Star Spangled Banner.
El segundo despertó con buen fútbol y estrategia y los Saints dominaron desde que dieron el zarpazo en los primero segundos con un onside kick que por lo general se guarda para los últimos minutos.
Los esperados comerciales fueron mejores que el año pasado ya que recobraron el humor que perdieron durante la peor parte de la crisis económica; pero no estuvieron a la altura de los anteriores. El humor prevaleció, me gustaron los de Bud Light y de Doritos por sobre otros como de McDonals, Coca Cola, E-trade y Snickers; o los de establecimiento de marca como Audi y Hyundai; aunque pensé que Toyota aprovecharía el espacio para pedir perdón o calmar a sus clientes u orientarlos para arreglar sus autos. No apareció. Otro mal paso para su deteriorada calidad.
Pero el más genial me pareció el de Google, una linda historia sobre viajar y conseguir trabajo en Paris, y hasta esperar la cigüeña en la ciudad luz. Me pareció genial porque no usó imágenes, sino texto, un contrasentido en la televisión. Pero la cajita del buscador es en realidad una imagen asociativa, algo a lo que estamos familiarizados y que usamos más de cien veces al día en busca de información, orientación o soluciones. ¿Quién podría vivir sin Google?