sábado, 8 de noviembre de 2008

AutoShow de Miami: crisis y sueños





La industria de los automóviles está entrando a su peor crisis de la historia. La debacle económica ha hecho que las ventas de las grandes automotrices estadounidenses hayan mermado hasta en un 40% como para GM y Ford, y que las Japonesas como Honda y Toyota alcanzaran casi el 30%. El gobierno estadounidense está pensando también pasar un plan de rescate ya que el país no puede seguir aumentando la tasa de desempleo. Los planes de compra y de leasing de automóviles están entregando incentivos considerables, como el paquete de "venta a precio de empleado" de la Chevrolet y de Cadillac, pero ni así las ventas remontan.


A pesar de ello, el AutoShow de Miami que se inició este viernes en el Miami Beach Convention Center permite seguir soñando a pesar de la crsisis. Mermó la cantidad de visitantes comparado a la asistencia de años anteriores, al menos este sábado que visité la feria con mi esposa, pero no disminuyó la oferta de modelos nuevos, híbridos, futurísticos y extravagantes. Aquí les paso algunas de las fotos de los autos que más me llamaron la atención, como el McLaren arriba de estas líneas que estaba en el "Pasaje del Millón de Dólares", junto a Rolls Royce, Lamborghini, Ferrari, Aston Martin y Maserati.



Gran Turismo Maserati




Rolls Royce, capota de acero inoxidable


Lamborghini Muerciálgo


Lamborghini Murciélago


Lamborghini


Lotus


Cadillac CTS Wagon 2010


Nissan GT-R


Mini Cooper S

Mercedes Benz SLR


Mercedes SLR


Audi A 4


Audi R8


Porsche Boxter

Porsche Cayman

Porshe Boxter

Solstice Coupe de Pontiac


Camaro, versión retro 2010


Corvette ZO6


Mitsubishi Eclipse

Lincoln MKS

Petrocassettes: Escándalos e información

Las decisiones éticas son siempre las más difíciles de adoptar cuando se trata de tener que discernir si se debe o no publicar una información cuando es obtenida en forma subrepticia. Tenía un discurso sobre acceso a la información pública preparado para la conferencia de este 5 de noviembre en el Congreso de Lima (parte de nuestra agenda de la SIP), pero tuve enseguida que cambiar el contenido ya que el público estaba más entusiasta de escuchar mi opinión sobre el escándalo de los “petro-cassettes”. Se trata de información que fue grabada en forma subrepticia entre funcionarios y dirigentes de compañías petroleras y que tras ser publicada, arrasó con un gran número de funcionarios del gobierno de Alan García.

El hecho involucró al director de la empresa estatal Perú-Petro, Alberto Quimper, al ex ministro de Agricultura, Rómulo León Alegría y al abogado Ernesto Arias Schreiber por los delitos de corrupción de funcionarios, patrocinio indebido, tráfico de influencias y asociación ilícita para delinquir. El escándalo estalló cuando el programa de televisión "Cuarto Poder" transmitió unas cintas grabadas subrepticiamente entre enero y septiembre, en las que Quimper negocia "una ayudita" con el ex ministro Rómulo León, representante oculto de Discover Petroleum, para que a esa empresa se le entregaran cinco pozos de exploración petrolera, como en efecto ocurrió.

“Cuarto Poder” decidió publicar los audios, pero otros medios - como el diario El Comercio que también recibió la información, decidió no hacerlo - dado que habían llegado en forma anónima a la sala de Redacción.

En este escenario, estas fueron mis palabras:

Tenemos que aclarar y distinguir algo, para hacer un análisis:
Primero a los hechos hay que verlos desde el punto de vista que la misión del periodismo es publicar, publicar y publicar. Desde esta perspectiva se analiza luego si la información es de interés público, que consecuencia traerá a los afectados y los beneficios sociales de su publicación; todo ello en un clima de autorregulación, en el que prima siempre la decisión de publicar. Esto es distinto a tener que pensar, como primera instancia, que no se debe publicar debido a alguna decisión judicial posterior, el temor a una demanda o a los intereses particulares en juego, o a otros aspectos penalizados por las leyes, como por ejemplo, la vida privada de una persona o la seguridad nacional.
Segundo al tratarse información tomada en forma subrepticia hay que analizar otros aspectos, como por ejemplo si los periodistas la han conseguido mediante métodos ilegales o anti éticos (como pueden ser cámaras ocultas o traspasar la propiedad privada) o si se les ha hecho llegar por otras fuentes las cuales han cometido los delitos o las faltas de ética, como fue en este caso de los “petro-cassettes”.
Tras el análisis y teniendo en cuenta el interés público y tras intentar obtener la información sin éxito por medios, y teniendo la mayor presunción de que la información es fidedigna, la prensa “no puede renunciar a la difusión de asuntos que hacen al interés público y al bien común”, como explican las Aspiraciones de la SIP.
Es cierto que si bien se reclama que no debe haber censura previa, como lo destacan varias constituciones y la Convención Americana, también es verdad que existen ciertos límites, que la libertad de prensa no es absoluta y que debe responder a responsabilidades ulteriores, las que deben estar establecidas por ley. Entre estas, se cuentan el derecho a la reputación de los demás, la protección de la seguridad nacional, el orden público, la salud o la moral públicas.
Sin embargo, para la aplicación de estos límites, para sopesar si la protección del honor o la moral pública o la seguridad nacional tienen mayor jerarquía que la libertad de informar y saber, es necesario que haya jueces probos, independientes y sabios que sean capaces de interpretar y conocer los valores de la libertad de prensa más allá de lo estrictamente estipulado por leyes que suelen ser demasiado restrictivas. La debilidad de los poderes judiciales o su dependencia al poder político ha conspirado muchas veces contra la libertad de prensa y de expresión.
Ha sido, en muchos casos, la Corte Interamericana de Derechos Humanos la que dictó jurisprudencia sobre libertad de prensa después de que tribunales nacionales escatimaron su relevancia. La película La Ultima Tentación de Cristo en Chile por cuestiones de moral pública; el caso del periodista Mauricio Ulloa en Costa Rica condenado por dañarle la reputación a un político corrupto que engañó a toda una sociedad o el del periodista-político Jorge Carpio Nicolle asesinado en Guatemala, son algunos ejemplos.
En Estados Unidos donde todavía existen debates ríspidos sobre el Acta Patriótica y los límites impuestos al trabajo periodístico, el caso de los Documentos del Pentágono es uno de los mejores exponentes de la lucha entre la libertad de informar y la seguridad nacional. En la década del 70, el New York Times decidió publicar los documentos que el gobierno había calificado de clasificados, incluso a pesar de que el ministro de Justicia afirmara que su publicación estaba penada por ley.
Tras una prohibición judicial, el diario apeló y la Corte Suprema terminó fallando a su favor, determinando que el gobierno no había demostrado que la publicación causaría “daño directo, inmediato e irreparable al interés nacional”.
Volviendo al caso que nos ocupa sobre los “petrocassettes”, conforme al principio de que el debate de asuntos públicos debe estar libre de inhibiciones, ser vigoroso y abierto, se debe entender que puede haber ataques cáusticos contra el gobierno y los funcionarios públicos.
Los periodistas, cuando sopesan esto y consideran que hay informaciones que son de interés público, como en el caso de los “petrocassettes” y considerando que no todo lo que establecen las leyes es bueno y lícito, están llamados a desafiar las reglas con el fin de que prevalezca la libertad de prensa.
En este caso, el interés público prevaleció y ello llevó a que el gobierno reconozca conductas corruptas y procedió a corregirlas. No siempre ocurre de esta forma cuando se denuncian escándalos, pero es obligación del periodismo no pensar en los resultados sino en la obligación moral de publicar.

viernes, 7 de noviembre de 2008

Lo más difícil en el periodismo

Participé en Lima de una conferencia en el Congreso entre legisladores y periodistas que nos abocamos a tratar dos temas inquietantes para ambos grupos y la sociedad. El acceso a la información pública y los crímenes contra periodistas irresueltos.

Fui panelista, pero más allá del tema general de acceso, me enfrasqué en la discusión sobre el papel de los medios de comunicación y del periodismo para ofrecer información que es obtenida ilícitamente y cómo se debe sopesar el valor del interés público por sobre el interés del periodismo o ante las prohibiciones que marca la ley.

El tema fue traído a colación por el caso de los “petro-cassetes” un escándalo de escuchas telefónicas clandestinas que luego de que fue publicado por algunos medios – otros decidieron no hacerlo – involucró al gobierno de Alan García, obligado a cambiar gran parte de su gabinete salpicado por la corrupción.

En el post de mañana ofreceré mi charla (que la estoy editando) y por el momento dejo esta entrevista que me sacaron hoy en diario El Comercio de Lima.

"Las decisiones éticas son las más difíciles en el periodismo"
El director de Libertad de Prensa de la SIP participó en Lima en un foro en el Congreso
Por Gerardo Caballero Rojas

Directivos de la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP), representantes del Consejo de la Prensa Peruana, directores de medios y congresistas analizaron la situación de la libertad de expresión y la democracia en el Perú. Entre los representantes del organismo hemisférico estuvo presente Ricardo Trotti, director de Libertad de Prensa de la SIP, quien se refirió al deber ético y al acceso a la información.

¿En el caso de audios o videos obtenidos ilícitamente qué debe primar: el respeto a la Constitución y las leyes o el deber de informar sobre actos de corrupción?
El deber del periodista es informar a sus lectores y que se genere un diálogo en la redacción para decidir si (la información) se puede publicar o no. En este caso (de los audios entre Rómulo León y Alberto Quimper), no fue un material obtenido ilícitamente por los periodistas. A ellos les fue dado como una denuncia pública. Además, lo que siempre tratan de hacer los periodistas es analizar las consecuencias, tomando en cuenta que la información sea necesaria para el público. El segundo aspecto consiste en establecer si hay algunas consecuencias relevantes para los funcionarios, para los afectados o para el propio medio. Y eso surge del constante diálogo en la redacción.

¿Y en el caso de audios ocurrido recientemente en el Perú?
Ni un caso es igual al otro. Se trata de discusiones diferentes. Obviamente tiene que haber un esfuerzo del periodista por tratar de identificar la fuente, pero en ocasiones esas fuentes no son identificables y prevalece el interés público.
Pero a veces son identificables, incluso se puede reconocer un interés comercial o político.

No existe una regla básica para decir a los medios qué tienen y qué no tienen que hacer. Eso depende de la política editorial del medio y del grado de necesidad de información. En esas situaciones no hay el periodista bueno y el periodista malo. Lo que hay es una serie de aspectos grises que se deben diferenciar. Siempre se dice que las decisiones éticas son las más difíciles de tomar en el periodismo porque se basan precisamente en esos grises.

¿Debe ser el periodista quien decide si se publica un material como el de los audios Quimper-León, o debería ser una instancia como el Poder Judicial?
No, tiene que ser el propio medio. La instancia judicial tendrá que ver si el periodista tiene responsabilidades ulteriores, pero nunca debería la justicia determinar la censura previa.

jueves, 6 de noviembre de 2008

NO a los matrimonios gay

Estas elecciones presidenciales rompieron paradigmas, estereotipos, récords y ocasionaron varias sorpresas. La más llamativa, es que los electores de la Florida y California votaron en contra de que se permita el matrimonio entre homosexuales, una sorpresa mayúscula si se tiene en cuenta que en ambos estados ganó por mayoría el voto liberal dándole los electores a Barack Obama, del Partido Demócrata, que habitualmente está alineado a ofrecer garantías legales a las uniones entre personas del mismo sexo.

También los electores de Arizona votaron por la misma prohibición, dejando solo a Connecticut y Massachusetts como los estados donde se permite el matrimonio civil entre gays. California había aprobado una ley en mayo de este año y desde entonces hasta donde regirá la prohibición, este 4 de noviembre, se oficializaron 18.000 matrimonios, por lo que quedará ahora a la Corte Suprema de ese estado decidir sobre el asunto lo que será, sin dudas, una de las mayores controversias para los californianos.

Por lo que se escuchaba con anterioridad a las elecciones, aparentaba que se trataba de un mero trámite y se descontaba un triunfo de los activistas, tema que recobró interés mundial después de que la Reina Sofía de España, en un libro autobiográfico reciente opinó que no estaba de acuerdo con los matrimonio gays, lo que le valió una andanada de reprimendas de parte de los partidos políticos y de la prensa que le recordó que la monarquía no debe expresarse sobre temas que le competen el Gobierno.

Más allá de eso, el libro escrito por una periodista del Opus Dei, dio realce a un tema que es controversial pero que muchos – los que están en contra - se cuidan de hablarlo públicamente porque suelen ser acusados de retrógrados e hipócritas moralistas.

Estoy seguro que para poder discutir sobre este tema primero hay que separar dos cosas. No creo que la gente haya votado en contra de la orientación sexual de las personas, a esta altura hay bastante mayor comprensión de la que había hace dos o tres décadas atrás; lo que se votó en contra es darle al matrimonio gay la jerarquía que tiene la institución del matrimonio, no en el aspecto legal, sino en el ético de acuerdo a los principios de la moral cristiana.

La lectura de estas votaciones es significativa. La discusión sobre este tema parecía estar solamente relegada a los activistas de los derechos de los homosexuales, a los políticos y a ciertos sectores de la prensa, pero parecía estar ausente de la agenda del ciudadano común. Se demostró lo contrario, se nota que fue un voto pensado si se tiene en cuenta que se votó liberal por un lado, con el apoyo a Obama, y conservador por el otro. Esto demuestra que si bien la gente a veces no tiene la voz o no se anima a decir su opinión públicamente por temor a que se le estereotipe, utiliza la mesa de votación o el cuarto oscuro para gritar su deseo.

miércoles, 5 de noviembre de 2008

Gracias por participar

Sentí el aplauso, me saqué los audífonos y supe que Obama había ganado. Eran las 9 de la noche y el capitán del vuelo 917 de American de Miami a Lima en la noche del 4 de junio interrumpió una película de Eddy Murphy para dar la proyección irreversible de que Barack Obama era el presidente de Estados Unidos. Histórico. Un afroamericano con el mayor número de votos de la historia presidencial del país. Gracias por participar es realmente el lema que tanto Obama como John McCain utilizaron para agradecer que la democracia se haya explayado con números récords de votantes.

De camino al hotel Los Delfines en Lima, la radio del taxi anunciaba a Obama como ganador. Ya era definitivo. Hacía minutos que McCain había dado su elocuente discurso. Ya en el hotel, CNN estaba enloquecida trasmitiendo a las 3 de la mañana el discurso de Obama y mostrándolo a él y a Joe Biden con sus familias saludando en el acto masivo de Chicago.

En mi Blackberry varios amigos esperaban respuestas de lo que diría después de haber votado republicano. Contesté uno por uno. Sigo pensando que McCain hubiera sido mejor para campear la crisis, de la misma forma que pensé que Al Gore era mejor que Bush en el 2000 y que en el 2004 pensé que Kerry era lo peor para elegir. Contesté justamente eso y me referí a mis post sobre porqué voté por McCain aunque hice la salvedad de que mis columnas siempre mostraron la preferencia del público, de la prensa, de las estrellas y de la mayoría de los países del mundo que ven que Obama podrá liderar al país y ayudar al mundo a salir de la crisis financiera.

Aquí en Lima, como en el resto de América Latina y Europa y Africa, se vivió la victoria de Obama como propia, lo que es un buen comienzo para que Estados Unidos deje de lado ese sentimiento antiamericano – que si bien es tradicional e histórico –Bush lo aumentó considerablemente durante su doble mandato y en particular en estos últimos tres años.

En lo personal me siento muy complacido y agradezco a quienes participaron de la encuesta en mi otro blog Prensa y Expresión que cerró anoche a las 8 de la noche, en el que votaron 67 personas. Obama ganó por mayoría, con 44 sufragios, 65%; McCain 21, 31% y Ninguno 2, 2%.

Si bien es un número insignificante, es al menos una lectura correcta de lo que realmente ocurrió. Gracias a todos por participar.

lunes, 3 de noviembre de 2008

Al fin... ¿Obama o McCain?

Parecía una carrera interminable, pero en un par de horas empieza el día decisivo. Después de más de un año y medio y de estar expuesto a tanta propaganda, análisis e información, sabremos quién será el Presidente. Se augura un resultado aproximado para mañana a partir de las cinco de la tarde

Hay mucho más en juego que Obama o McCain. Además de la renovación de la Casa Blanca, podrá haber cambios sustanciales en los 435 asientos de la Cámara de Diputados, en 33 puestos del Senado, mientras que 11 estados tendrán nuevos gobernadores. Aquí en mi distrito en el Sur de la Florida, también tuve que votar sobre la permanencia de varios jueces, administradores para el condado, sobre el casamiento de personas de un mismo sexo, sobre si los concejales deberán seguir ganando 5.000 dólares o tener un salario de algo más de 95 mil y si la universidad comunitaria podrá contar con más dinero.

La Florida es un estado privilegiado. Siempre ha sido, para bien o para mal, deseado por todos, ya que representa el 10% de los 270 votos que se necesitan en el Colegio Electoral, de 538 miembros, para ganar las elecciones. California tiene 55 electores, siendo el estado más poblado del país, pero muchas veces, debido a la diferencia horaria de tres horas con el Este del país, las elecciones suelen estar definidas. El número de electores de un estado es el equivalente a la suma de diputados y senadores federales que tiene, a lo que se suman tres del Distrito de Columbia, la capital, que no cuenta con representantes nacionales.

La importancia de la Florida es crucial por ser uno de los estados que junto a Ohio, Michigan, Colorado y Pennsylvania suelen cambiar mucho de bando. Por eso Obama y McCain están terminando su campaña en estas tierras; Obama en Jacksonville, un área muy republicana, y McCain en Tampa Bay.

Pero esta vez puede ser diferente. El Partido Demócrata consiguió registrar mucha más gente que el republicano y durante las elecciones anticipadas de estos últimos 15días, se calcula que votaron 300.000 personas más de los Demócratas. Los Republicanos esperan que este martes, los indecisos cuenten a su favor, de lo contrario pueden perder el estado de la Florida al que siempre necesitaron desde 1924para entrar a la Casa Blanca.

Esta campaña ha sido histórica y este martes lo será aún más. Se calcula que más de 130 millones de personas votarán y que los indecisos, un gran número todavía, pudieran dar la vuelta a estas elecciones que favorecen a Obama.
Democracia a pleno.

domingo, 2 de noviembre de 2008

Voté por John McCain

No esperé hasta el martes. Después de meses de leer, mirar y escuchar noticias, encuestas y análisis, preferí votar anticipadamente este fin de semana. Tras cinco horas y media de cola deposité mi boleta en la biblioteca pública de Miami Lakes. Toda una fiesta democrática.

Si me hubiese dejado guiar por la lógica, por la prensa, por las encuestas, por lo que se dice en el mundo entero, hubiese tenido que votar por Barack Obama. Sin embargo, Obama no representa lo que son mis convicciones ideológicas – las que redescubrí en estos meses - por eso tuve que sufragar por ideas más conservadoras, a pesar de que tuve que luchar un poco internamente, debido al lastre o al mal manejo que de ellas ha hecho el presidente George W. Bush en los últimos años.

Gane quien gane creo que cualquiera de los dos son excelentes personas, sabrán defender los intereses del país y terminarán haciendo un excelente trabajo. No creo que Obama tendría una administración socialista que busque redistribuir la riqueza al estilo de lo que se idealiza en otros países, ni que McCain sería la continuidad de Bush o que es culpable de la crisis porque votó el 90% de las veces a favor del actual Presidente; creo que esos aspectos son parte de estrategias que le han servido a los dos para hacer contra propaganda.

Tampoco me importa que uno sea joven e inexperto o el otro sea más viejo y saludable, ni que Sarah Palin o Joe Biden tendrían una carga difícil de sobrellevar si les toca asumir la Presidencia. Pienso que hubo una presión constante de la prensa a la que por ser más liberal, le resulta más fácil opinar en contra de los republicanos.

De todos los temas que han tratado ambos candidatos, hay tres que sobresalen y que me llamaron la atención por sobre los demás. Dos de ellos, porque han hablado hasta el cansancio y el tercero porque lo omitieron olímpicamente: la economía o la crisis financiera; la política exterior o la guerra en Irak y Afganistán; y la inmigración o qué hacer con los doce millones de indocumentados.

Economía: Obama se muestra mucho más proteccionista, cerrando las fronteras y volviendo al “Made in America”. McCain favorecerá los tratados de libre comercio y de esa forma ayudará a las economías de América Latina. Sobre el tema impositivo los planes no son muy diferentes y ambos respaldaron el plan de rescate para la crisis financiera sobre la que nadie puede acusar sólo a Bush, ya que el Congreso de los últimos ocho años también debe cargar con esa culpa.

Guerra: Obama está favoreciendo una retirada de tropas de Irak y las redirigiría hacia Afganistán; y se permitirá hablar sin condiciones con los líderes autoritarios o dictadores; mientras que McCain demorará el retiro de las tropas y mantendrá una política más dura con los dictadores, poniendo condiciones, como la liberación de presos políticos, antes de sentarse en la mesa de negociaciones.

Inmigración: Ninguno de los dos ha sido muy explícito por temor a desbandar a gente de su propio partido. Seguramente en el 2009 cualquiera de los dos tendrá que buscar una solución al tema migratorio, y Obama deberá tener más responsabilidad porque los hispanos lo estarán respaldando más en las urnas.

No comparto mucho las ideas del Partido Demócrata pero puedo convivir con ellas, como en el 2000, ya que si hubiera votado lo hubiera hecho por Al Gore, en contra de los republicanos.

Pero en este momento no confío en los demócratas. Creo que la crisis actual, y con un Congreso muy diferenciado a favor de los liberales, Obama se sentirá muy justificado a tomar medidas muy extremas que serán, en los primeros meses y años, muy populares pero también muy drásticas y peligrosas, con regulaciones al por mayor, que entorpecerán el sistema económico a largo plazo.

Me incliné por McCain porque sostendría las ideas conservadoras, las que comparto más plenamente y en general, considerándolas mejores para este país y más convenientes de este país hacia el mundo. Al país le esperan varios años de desafíos pero también de oportunidades. Creo que McCain sabría lidiar con ambos aspectos mejor que Obama.