domingo, 7 de agosto de 2011

La política manda por sobre la economía

Siempre pensé que la política es la que altera la economía y no al revés como sostienen muchos economistas, como si el mundo de las finanzas actuara con autonomía e influenciara a  las demás disciplinas de nuestras vidas. Algunos aducen que una catástrofe natural podría ser el ejemplo perfecto de cómo un acontecimiento podría tener un impacto en la economía, sin que haya sido provocado por decisiones políticas.


Sin embargo, las consecuencias económicas de una catástrofe, siempre pudieron haberse minimizado de haberse tomado las correctas medidas políticas. El número de fatalidades, por ejemplo, está más atado a la falta de infraestructura o a las deficiencias o negligencias que a la catástrofe en sí misma. Los casos del terremoto en Haití o de la inundación de Nueva Orleans por el caso de Katrina sirven de ejemplo.

Esta semana a partir de mañana veremos qué pasará con la economía global, si continuará con el derrotero de la que finalizó este viernes. Si el hecho de que Standard & Poor’s bajó el viernes la máxima nota de AAA a AA+, seguirá impulsando los mercados de valores hacia abajo en todo el mundo o si el acuerdo entre republicanos y demócratas para alzar el techo de la deuda estadounidense fue insuficiente, así como los paquetes de estímulo que Barack Obama repartió apenas iniciada su Presidencia para ayudar a paliar la crisis.

Así como en la anterior hecatombe financiera que llevó al mundo a la catástrofe económica y recesión por culpa de la burbuja y los banqueros estadounidenses, la actual crisis está impulsada por decisiones políticas mal tomadas. Washington gasta más de lo que ingresa y Obama parece mantener al país en la disyuntiva de seguir manteniendo la economía sobre la base de emitir papel billete sin respaldo.

La opción es pésima. La decisión política de emitir billete es una solución a corto plazo, pero si el déficit no se corta mediante el ahorro, las exportaciones y la reducción del gasto público, el futuro se verá cada día más incierto.

3 comentarios:

Juan David Nau dijo...

Tiene mucho sentido lo que dice Trotti sobre la economía y la política. Sin embargo ignorantes izquierdosos repiten que el capitalismo está quebrado y que los EEUU van para abajo.
Es una postura muy simplona, porque la crisis que se viene se debe a la gran dosis de demagogia en Europa y USA. Sí, Obama es el mayor demagogo desde Jimmy Carter y su estilo de liderazgo es lo que lleva a que el Congreso vaya por un lado y él por el otro.
El pueblo gringo es muy consciente de su situación y lo mas seguro es que el negrito no repite. Las encuestas no lo acompañan, y es mejor que se le dé chance a otro menos arrogante y con los pies sobre la tierra.

Anna Conda dijo...

A raíz de este problema es que el presidente Obama dio su discurso de hoy. Lo interesante es que no se lanzo a atacar a la empresa calificadora ni a quitarle atributos. Su discurso fue principalmente sobre la pugna política extremista dentro del congreso que ha llevado a esta situación.
Si hubiera sido Chávez o cualquier otro gobernante de América Latina todavií estuviera acusando a la empresa evaluadora y prohibiendo a sus miembros la entrada al pais.
Distinto los paises civilizados.

Anónimo dijo...

cual negrito.... expresate bien del pueblo afro,te respeto tu opinion pero ojo con los estereotipos y