miércoles, 29 de junio de 2011

Humala y la libertad de prensa


MMMMmmmmmmmmm!!!!  Ojalá que Ollanta Humala no se desvié de sus promesas de campaña sobre garantizar la libertad de prensa después de que asuma el 28 de julio la silla presidencial en Perú. Durante el proceso electoral que culminó el 5 de junio venciendo a Keiko Fujimori, Humala, para coronar su victoria, tuvo que prometer que no dictaría normas que signifiquen censura contra la prensa, así como que no estatizaría empresas y dejaría en el pasado sus sueños nacionalistas chavistas para abrazar el progreso de las políticas económicas del Brasil y mantener las que vino tejiendo al actual presidente Alan García.

Pero sorprenden sus declaraciones en su visita de ayer al presidente ecuatoriano Rafael Correa, porque de la nada salió diciendo que la libertad de prensa no debe ser solo para una élite sino para todos los peruanos. Preocupa que lo haya dicho frente a otro mandatario que se puso de inmediato muy contento y asintiendo sus dichos ya que mantiene una posición de confrontación continua contra los medios y los periodistas del país porque considera que la libertad de prensa está secuestrada y que toda crítica tendría la intención de desestabilizar la democracia.

Humala se equivoca. Sus declaraciones sobre que la libertad de prensa pertenecería a una elite, posiblemente – interpretando sus palabras – a los medios y periodistas peruanos que criticaron su campaña, son una señal peligrosa de que podría pensar en retaliaciones de algún tipo. La libertad de prensa no es de una elite ni de grupo alguno ni del gobierno como creen muchos mandatarios de la región, por más que pueda haber algunos sectores que consideren que tienen el patrimonio de la palabra. Se trata de un derecho humano fundamental que el estado tiene el deber de custodiar, no de cuestionar.

Ojalá que Humala refresque su memoria leyendo tratados sobre derechos humanos donde se especifica que una de las prioridades es la libertad de prensa, como en la Convención Americana y la Declaración Universal de los Derechos Humanos, así como la Carta Democrática Interamericana.

Los medios no son santos y muchas veces su tinte político no les permite tampoco reconocer que la libertad de prensa está por arriba de sus intereses. Sin embargo, es mejor tolerar esos abusos de prensa cometidos por algunos que tratar de dictar censuras para todos los medios, lo que en definitiva es censurar en forma indirecta a toda la población. Humala debe recordar que pese a que una prensa chicha era manipulada con dineros espurios durante la presidencia del clan Alberto Fujimori – Vladimiro Montesinos, fue justamente la libertad de prensa, con medios plurales y diversos, la que le permitió a Perú superar aquella época de corrupción y autoritarismo.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

La verdad es que ya es demasiado tarde para lamentarse. El pueblo peruano tuvo la oportunidad de elegir otro derrotero y escogió desperdiciar dicha oportunidad. Que conste, tenía suficiente ejemplos a su alrededor antes de dar su voto. Aquí no hay víctimas...

Don Hipo dijo...

Veremos si el ego de Humala es tan ridículo como sus panas Chavez y Correa. Cada nuevo "líder" de izquierda quiere su poco de grandeza prestada. El sentido común parece ser el menos común de los sentidos.

Anna Conda dijo...

Los gobiernos de izquierda son tan represivos de la libre expresion, que el gobierno venezolano ha cancelado una cumbre de presidentes de America Latina y el pueblo de Venezuela se entera porque sale en los periodicos digitales de otros paises.
Hay que mantener a los pueblos hundisos en el misterio y la intriga. Por ese camino quiere ir el Humala.