miércoles, 8 de octubre de 2008

Zapatero obediente

Ante el reclamo de la SIP en sus conclusiones de que España debe adoptar una ley de acceso a la información pública para adecuarse a 22 miembros de 27 de la Comunidad Europea, el presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, se mostró muy obediente.

Dos horas después, cuando le tocó clausurar la asamblea de la SIP aquí en Madrid, y como Zapatero a tus zapatos, el presidente anunció que el Gobierno promoverá "una nueva ley que garantice el mayor acceso posible a la información pública en España", lo que hará durante el proceso legislativo actual.

Además, Zapatero ahondó sobre los medios públicos, regocijándose con su presentador, el presidente de la agencia oficialista EFE, Alex Grijelmo, quien dijo que en los cinco años que lleva frente al Gobierno, Zapatero respetó la independencia de la agencia, jamás se entrometió, ni siquiera para dictar una coma. Apostó por "profundizar en la naturaleza de servicio público de los medios públicos más que en su naturaleza comercial".

Ante sus declaraciones de independencia y servicio, no pude dejar de pensar en las agencias y medios nacionales latinoamericanos que son utilizados como meros órganos de propaganda de los gobiernos de turno.

Zapatero pidió a los medios que, ante la crisis económica y financiera, actúen favoreciendo la transparencia pero siendo conscientes de que trabajan "con un material altamente sensible", advirtiendo de que la crisis financiera "nos compromete a todos".

Defendió la libertad de expresión y de información como baluartes de la democracia y aseguró que para él es un "código personal" el respeto a la libertad de prensa y a la tarea de los medios de comunicación, incluido el aceptar "las críticas, que no son pocas". De hecho, pidió a los medios que sigan ejerciendo su capacidad de crítica, aunque a veces el poder los vea "con preocupación". Según dijo, en sus cinco años al frente del Gobierno ha constatado que "el poder necesita una crítica constante". "Es una buena manera de limitar el poder, incluso para los que procuramos practicarlo con ciertas limitaciones", afirmó.

El jefe del Ejecutivo quiso destacar que durante los años de Gobierno socialista se ha "robustecido" el pluralismo de los medios de comunicación en España, con la aparición de nuevos medios de comunicación tradicionales y digitales y "más independencia de los medios públicos". De hecho, puso como ejemplo de su independencia que siempre hay algún ministro que se queja de la cobertura que tiene.

No obstante, admitió que "se puede mejorar y hay tareas pendientes", como adaptar el marco regulatorio a la evolución tecnológico de los medios y "profundizar en la naturaleza de servicio público de los medios públicos más que en su naturaleza comercial".