La balacera de un tarado en el cine de Aurora,
Colorado, durante la previa de la trilogía de Batman el 20 de julio, que dejó
12 muertos y 70 heridos, renovó dos polémicas: si los cómics incentivan la
violencia y por qué, después de tantas masacres, cualquiera puede comprar armas
libremente.
Por la primera – pese a que la espectacularidad del
atacante al usar varias armas, disfraz, chaleco antibalas, máscara anti gas,
rifle de asalto y teatralizar algunas escenas de la trilogía fílmica - aunque no se puede descartar que tuvo
actitudes de imitación, es inverosímil atar su conducta a Hollywood, tan solo
por sentido común. Si ese fuera el caso, casi todos nosotros seríamos asesinos
en potencia al estar expuesto a la espectacularidad de Hollywood o a las
noticias que consumimos cada día. Excepto para los desequilibrados, se entiende
que lo que proviene las películas, los videojuegos, las noticias, es parte de
la cultura del entretenimiento que si bien puede tener culpas en el cambio de
la cultura, no es responsable por este tipo de masacres.
Pero por la segunda, creo que sí hay un alto grado
de responsabilidad de la cultura permisiva de la venta y tráfico de armas en
este país. Que la gente pueda comprar armas para la auto defensa, está
demostrado cada vez más, que en lugar de ello sirven para que puedan ser usadas
contra los ciudadanos a veces en situaciones de inocencia, como este caso de
Aurora, de la escuela de Columbine o cuando el caso de la legisladora Gifford,
pero también en situaciones dudosas como la usó Zimmerman.
La libertad con la que se compran armas aquí en
EE.UU. también ha servido para que muchas de ellas lleguen a manos de los
narcotraficantes mexicanos, incluso para que ese tráfico lo motiven las
autoridades estadounidenses.
Lo más contradictorio de todo esto, es que mientras
los cabilderos y la NRA (National Rifle Association) insisten en el derecho
constitucional que asiste a cada ciudadano a comprar armas, siguen los grandes
esfuerzos para controlar otros derechos individuales que tienen que ver con la
prohibición de los cigarrillos o la legalización de las drogas, dos
actividades, aunque dañinas son solo sustancias peligrosas para quienes las
consumen. Las armas son letales para los demás.
1 comentario:
Eso es lo que le he venido afirmando todo el 2011 y 2012; Ninguna libertad puede ser absoluta. Pienso que es un grave error (e ingenúo..)que un pais como USA,junto con otros paises de Europa, líderes en el consumo de Drogas (Cocaina, Marihuana, CracK, Heroina, entre otros, cualquier ciudadano pueda comprar todo tipo de armas libremente, sin muchas restricciones.
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