sábado, 22 de diciembre de 2012

Como en el Lejano Oeste


Finalmente la Asociación Nacional del Rifle (NRA) salió de su letargo este viernes para hablar de las “contribuciones significativas” que el miércoles prometió – después de pasarse agazapada y avergonzada tras la masacre en la escuela primaria Sandy Hood de Newtown – para evitar que sucedan otros tiroteos a mansalva en las escuelas del país.

Hubo ciertas esperanzas de que el anuncio del miércoles llevara a esta influyente organización a aportar medidas interesantes. Sin embargo, como también se temía, no aportó nada espectacular, simplemente propuso combatir a las armas con más armas. Considera que la mejor solución es poner policías armados en las escuelas para disuadir a los atacantes.

Puede que la medida a corto plazo intente disuadir a los imitadores y, complementariamente, proteger a los niños; pero, a largo plazo, se necesitan medidas más audaces que tienen que ver con el acceso desmesurado que cualquier persona puede tener en EE.UU. a armas de guerra como la utilizada por Adam Lanza. La política del “ojo por ojo, diente por diente”, nunca fue tan efectiva, como que sí despertó más violencia, y de eso hay pruebas a montones en las políticas públicas de los países y hasta retrotrayéndonos al lejano oeste.

Una medida más interesante de la NRA hubiera sido ponerse a disposición del vicepresidente Joe Biden, quien nombrado por el presidente Barack Obama, está liderando un grupo de trabajo para encontrar soluciones de largo plazo, no solo en materia de control y restricción sobre el uso de armas de fuego, sino también sobre programas de salud mental, prevención del delito, restricciones de licencias, etc…

La NRA, como era de esperarse, solo aportó una ineficiente “contribución significativa”  y, encima, lo único que hizo es criticar a los medios de comunicación, al cine, a la música y a la industria de los videojuegos como los causantes de la violencia social. Seguramente, a partir de ahora, seguirá tratando de influir a los congresistas con el mismo tipo de cabildeo agresivo que utilizó para que las armas de fuego no sean parte del debate nacional.

Pero esta vez, creo que en nombre de los “20 angelitos” asesinados a mansalva en Sandy Hood, el público, indignado, no bajará su presión hasta que haya cambios de consideración. La NRA esta vez no se enfrenta contra congresistas, por lo que le resultará difícil dejar de admitir responsabilidades y aportar algo más significativo.   

2 comentarios:

Aquiles Dejo dijo...

No se puede negar que los de la NRA son sinceros. No andan con posiciones románticas ni palabras bonitas para endulzar al público.
Lo de ellos es plomo macizo y al que no le guste, le dan mas.
Siempre hay dos caras de la verdad, todo depende de que lado está uno. Con los pacifistas, o con los que les gusta tener y portar su cuete.

El huevero dijo...

La venta de armas es el negocio mas rentable del ser humano. Es de ilusos pensar que lo van a dejar asi como asi.