El presidente Hosni Mubarak apeló a lo que apelan los demás autoritarios, a las multitudes pagadas por el régimen, llevadas en autobuses y manipuladas para convertirlas en turbas que generan violencia y con ello miedo.
Así quedó demostrado hoy, cuando a la protesta de las multitudes egipcias que expresaban su aliento para que Mubarak renuncie, el gobierno le mandó una contra protesta de miles de personas, que identificadas como sus seguidores, atacaron a la multitud. La escaramuza no se hizo esperar, y entre medio de piedras, bombas molotov y machetazos, siete personas murieron y unas mil quinientas resultaron heridas.
Así como el chavismo, el castrismo o el peronismo de antaño o cualquier régimen nacionalista, el régimen de Mubarak desnudó su autoritarismo al organizar estas marchas en su apoyo mediante la manipulación de los empleados públicos y los adictos que por un par de monedas se prestan a gritar consignas a favor del mejor postor.
La fórmula del autoritarismo es fácil, nacionalismo, patriotismo y defensoría del régimen. Cuando sus políticas fracasan y los pueblos se levantan, generan la contra propaganda mediante la agitación de las masas las que son utilizadas para crear miedo y autocensura. La imagen no puede ser más que patética. Miles de egipcios, por miedo a perder sus vidas o ser agredidos, están abandonando sus reclamos por una mejor democracia y hasta los medios de comunicación internacionales y los corresponsales extranjeros fueron agredidos, detenidos y encarcelados.
El régimen de Mubarak se está mostrando en su plena dimensión.
2 comentarios:
El uso de turbas no es nada nuevo. En Honduras son populares desde la Mancha Brava de Lopez Arellano, evolucionando hasta la chusma llamada resistencia del armadillo zelaya. Somos maestros en ese arte de Tercer Mundo y nada nos puede enseñar Mubarak. Lo que podemos apreciar es que en los países de verdad civilizados como Dinamarca, Holanda, Suecia o Japón esas cosas son impensables. Eso es lo que nos diferencia del mundo del futuro.
Excelente comentario Juan David. Muchas gracias.
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