viernes, 5 de junio de 2009

Venezuela autoritaria

Un nuevo informe de la organización Freedom House pone muy bien a Venezuela en el mismo saco que China, Rusia, Irán y Pakistán como uno de los países cuyos regímenes autoritarios minan el desarrollo democrático no tan sólo dentro de sus fronteras, sino también afuera.

Acusa a estas naciones de desacreditar a las organizaciones pro derechos humanos de una forma sofisticada, en un informe que se dio a conocer esta semana en coincidencia con el aniversario de la masacre de la Plaza de Tiananmen, justo cuando el gobierno chino prohibía la entrada a la plaza a los periodistas, corresponsales extranjeros y curiosos, al tiempo que censuraba el internet y las redes sociales para que los ciudadanos chinos siquiera pudieran intercambiar comentarios al respecto.

El informe denominado “Degradando la democracia”, ofrece ejemplos concretos sobre cómo en estos cinco países se está socavando el imperio de la ley, los derechos humanos y la libertad de expresión. Dado a conocer ayer, también coincidió con nuevos ataques del gobierno de Hugo Chávez contra la cadena Globovisión, televisora que tiene los días contados, así como ya los tuvo la señal de aire de Radio Caracas Televisión.

El informe completo que se puede encontrar en el sitio de internet de Freedom House, se refiere a la ayuda millonaria que algunos de estos países están haciendo a otros, minando estrategias de organizaciones intergubernamentales sobre el mejoramiento de la gobernabilidad y la reducción de la corrupción. También explica que estos regímenes están contrarrestando las acciones de organizaciones como la OEA, creando nuevas instituciones como lo hace Chávez sin definiciones en materia de derechos humanos.

Peligroso además, es que estos autoritarismos están modificando los parámetros y definiciones de la democracia, confundiendo a las poblaciones internas y externas a través de amplias campañas de propaganda mediática. Al mismo tiempo, cercenan las comunicaciones en el internet y manipulan los sistemas educativos para distorsionar la historia mediante un lente nacionalista, hostil, antidemocrático y sospechoso del mundo exterior.